Sabemos que resulta raro pensar que la regla sea "perfecta” para viajar, pero tenemos algo que contarte… hemos dado con la solución al drama de viajar con la regla y se llama: ¡copa menstrual! Existe desde hace más de 100 años, pero no ha sido hasta hace un par de años cuando se ha puesto de moda y las mujeres hemos empezado a utilizarla como alternativa a tampones y compresas. Si todavía no sabes lo que es, te lo contamos todo aquí.
La copa menstrual tiene muchas ventajas, pero para las amantes de los viajes tiene una muy especial. Por fin nos olvidamos de cargar con nuestro neceser gigante y de las cosas que no se pueden hacer por estar con la regla. Si eres de este grupo de mujeres, sigue leyendo hasta el final (¡hay sorpresa!).
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La regla, esa "gran" compañera de aventuras
¿Te suena de algo eso de organizar hasta el último detalle de una escapada de fin de semana y que tu querida amiga la regla quiera apuntarse al viaje? Segurísimo que sí, porque ella es así de protagonista. De hecho, si el viaje dura un fin de semana puede que logres librarte de ella, pero como te vayas 15 días estás perdida.
La única opción que nos queda es unirnos a la regla y olvidarnos de lo frustrante que puede llegar a ser en algunas ocasiones. Pero, ¿cómo vamos a dejar de preocuparnos por la regla durante un viaje? Cambiando el método que utilizas, así de fácil.
Que la regla no te estropee el viaje: ¡mi primera experiencia viajando con la copa menstrual!
En más de una entrevista hemos contado que la idea de crear la copa menstrual GlupCup surgió al hacer la maleta para un viaje de cinco meses por América del Sur. Cuando me di cuenta de que necesitaba llevar casi 100 tampones, calcular la absorción de cada uno y añadir compresas para prevenir las manchas nocturnas; lo tuve claro. Había llegado la hora de cambiarme a la copa menstrual y adaptarme a ella, de hecho, no me llevé más que 10 salvaslips por si acaso.
Durante las dos primeras reglas me agobié un poco porque tenía fugas y no sabía si me estaba colocando bien la copa, si iban a seguir apareciendo las infecciones de orina (mis segundas compañeras de viaje favoritas), si iba a poder lavarla en hostales de Bolivia o Ecuador… ¿y sabéis qué? Al final todo es más natural y más normal de lo que imaginamos.
El experimento resultó ser una maravilla y al tercer mes ya estaba proclamando a los cuatro vientos mi amor por la copa menstrual. ¡No me podía creer que hubiese tardado tanto en usarla! Sigue leyendo, te voy a contar todo lo que aprendí viajando con la copa menstrual.
Consejos para viajar con la regla utilizando la copa menstrual
El primer consejo es que no hagas lo que hice yo, es decir, antes de viajar con la copa menstrual prueba a utilizarla en tu zona de confort, ¡cómo en casa en ningún sitio! Con un par de meses de práctica te convertirás en toda una experta. Aquí te cuento todos mis trucos para utilizar la copa menstrual por primera vez.
Lo siguiente que debes tener en cuenta es que vayas a donde vayas debes mantener unas condiciones de higiene adecuadas. Lavarte las manos antes y después de manipular la copa menstrual es fundamental para evitar infecciones. El otro punto a tener en cuenta es la disponibilidad de agua potable en el destino al que vayas a viajar. Si no la hubiese, estarás acostumbrada a beber agua embotellada, así que utiliza esa misma agua para limpiar tu copa entre cambio y cambio. Para esterilizarla no hace falta que el agua sea potable, ya que al hervirla se eliminarán todas las bacterias.
Muchas veces no podrás esterilizar tu copa cuando lo deseas, así que en cuanto encuentres un alojamiento con hervidor de agua o con restaurante, aprovecha para pedir que te calienten un poco de agua. Si llevas el hervidor plegable que incluimos con nuestra Copa GlupCup te será mucho más fácil. ¡Yo ya no me separo de él!
Tampoco te olvides de guardarla en una bolsita transpirable como la que te damos en GlupCup. Nunca lleves la copa cerrada en recipientes de plástico porque es muy importante que pueda liberar toda la humedad que contenga.
Si tienes opción, lleva una copa menstrual de repuesto. Nunca sabes lo que puede pasar durante un viaje, así que mejor prevenir y más aún si se trata de un viaje de varios meses. Yo en alguna ocasión no tuve forma de esterilizar la copa de un mes a otro, así que las iba alternando. Para eso te recomendamos que te compres nuestro Pack GlupCup que incluye dos copas menstruales de la talla que elijas.
Para el drama de los baños públicos tenemos un montón de consejitos en el post de cómo cambiarte la copa menstrual en un baño público. Para viajar lo mejor es organizarse bien las excursiones y analizar un poco las opciones que tendrás de acudir a un “buen” (todas sabemos que no siempre es así). En cuanto veas uno, cámbiate la copa, aunque no hayan pasado las horas previstas, siempre es mejor adelantarse a los acontecimientos.
Y por supuesto, fuera mitos. Puedes hacer todas las actividades que quieras: nadar, bucear, volar, hacer senderismo, tirarte en parapente o hacer el pino. ¡Con la copa menstrual te olvidas de que tienes la regla!
Mi último consejo, y el más importante, es que le cuentes a todo el mundo las ventajas de viajar con la copa menstrual. Es importante que difundamos el mensaje y nos ayudemos las unas a las otras a lograr una menstruación que nos haga sentir un poquito más cómodas en nuestro día a día. Y si además colaboras con una buena causa, ¿qué más se puede pedir?
Y tú, ¿te animas a pasarte a la copa menstrual?
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